Como ha ocurrido casi desde el principio de su carrera, un nutrido grupo de cómplices rodea a Paula Cendejas para ordenar el resultado de este tiempo de trabajo, en un equilibrio coherente entre sonido y contenido que brilla en todo momento a lo largo de Fomo en forma de producción pulida y elegante, cuidada hasta el más mínimo detalle. “Lucas Otero es el main producer en este caso, y ha sido una de las cabezas pensantes más importantes en la creación de este álbum. También está Estani, con el que he hecho un feat. que se llama Salir; está Carlos Ares, que es una persona de mi círculo de confianza; Oddliquor y Mayo aparecen en varios temas… Hay un esqueleto en el álbum de cinco o seis temas que he hecho con el mismo equipo y el mismo productor, pero al final durante este tiempo he estado viajando, conociendo a otros productores, otros artistas. Colaboraciones y sinergias que al final surgen de forma natural, y ha sido un proceso creativo dispar. Con mi equipo yo tengo una forma de trabajar muy específica, que es llegar al estudio y tener muy claro qué me inspira hoy, de qué quiero hablar, y a partir de ahí empezamos. Pero luego, si de repente voy a Argentina a trabajar con un productor de allí, normalmente tenemos menos tiempo, es todo mucho más rápido. Mi proceso creativo ideal sería poder levantarme por la mañana y decir: ‘Hoy quiero trabajar sobre esto, me apetece escribir sobre esto otro’. Pero luego, si viajas mucho y estás todo el día de aquí para allá, te tienes que adaptar al mundo”. Esta adaptación queda plasmada en forma de una serie de colaboraciones internacionales que va más allá de un ambicioso listado de featurings con Danny Ocean, Soulfia o Micro TDH. El disco está trufado de influencias latinoamericanas -versión del clásico salsero Devórame otra vez incluida-, dando la sensación de trabajo construido con la mirada a uno y otro lado del Atlántico. “Es verdad que tengo una conexión especial con Latinoamérica, y se aprecia en el álbum. Incluso en las colaboraciones; de manera muy orgánica han salido más colaboraciones con gente de Latinoamérica que con gente de aquí. Yo soy madrileña, pero consumo mucha música latinoamericana y admiro a un montón de artistas de allí, así que surge solo. No sé si la vida me está diciendo ‘vete a Latinoamérica, vete a México…’”.